Sobre Nosotros

Historia

1947

La Cooperativa Santa Maria Magdalena, fue fundada en el año 1947 para aunar esfuerzos ante una situación climatológica adversa. Esta misma vocación de servicio guió la actividad de la Cooperativa a lo largo de los años.

1979

En 1979, se fundó la sección de comercialización bajo esta misma premisa. Conscientes de su vocación, los objetivos de la cooperativa han sido siempre la de asegurar a sus asociados el máximo beneficio posible.

2020

En el año 2020, la cooperativa trasladó su actividad a unas nuevas intalaciones para poder continuar su actividad, debido a que con el paso de los años, sus instalaciones quedaron incluidas en el casco urbano de Novelda.
Nuestras nuevas instalaciones cuentan con un total de 5400 m2 donde se ubican todas las actividades de la Cooperativa.

Producción

Nuestros campos,
producción propia

La Cooperativa posee instalaciones propias lo que nos permite adaptarnos rápidamente a las demandas del mercado.

Desde su fundación, la Cooperativa ha dado respuesta a las demandas de nuestros asociados y clientes.

En un mercado siempre cambiante, y caracterizado por la concentración de la oferta y la demanda, la eliminación de intermediarios y cambios varietales, la Cooperativa se revela como un elemento de extraordinario valor.

Por una parte, nuestros asociados comercializan su producto directamente, la unión de todos ellos permite un aumento de la oferta y con ello el acceso a canales de distribución que de otra manera son inabordables.

Por otra parte, la distribución consigue el trato directo con los productores, lo cual redunda en un aumento del beneficio para todos los integrantes de la cadena que va desde el productor hasta el consumidor.

Embolsado

El embolsado es una técnica artesanal y natural que consiste en cubrir la fruta con una bolsa de papel especial, los llamados «bolsos”. A finales de Julio, cuando las uvas empiezan a madurar, se seleccionan los racimos uno a uno y se embolsan de manera totalmente manual.

El embolsado de la uva la protege de los agentes externos, como el ataque de insectos y de las condiciones climáticas, de modo que la fruta es protegida de manera totalmente natural reduciendo así el uso de fitosanitarios. La técnica artesanal del embolsado permite que la uva crezca con un punto óptimo de maduración conservando la buena calidad de la fruta, su color y textura, ya que su protección limita los posibles defectos de la piel. Con ello obtenemos una uva con una piel más fina y además se consigue prolongar su maduración.

Nosotros somos especialistas en la fabricación de bolsas de papel, con lo  podemos abastecer a más cosechas tanto de uva como otras frutas que también usan este proceso natural de maduración, contribuyendo de este modo a cultivar un producto natural y, con ello, a la sostenibilidad y cuidado del medio ambiente.